Los tratamientos a base de disolvente orgánico se utilizan normalmente con instalaciones de tratamiento a baja presión (doble vacío) y sistemas de tratamiento de revestimiento. El producto final puede ser adecuado para las clases de uso 1, 2 y 3, según las especificaciones del procedimiento utilizado.
El tratamiento con disolvente orgánico se usa a menudo para productos de carpintería, ya que no cambia las dimensiones del tiempo ni eleva la veta. Tampoco cambia el color de la madera, a menos que se cambie intencionadamente para su identificación.
Consulte la siguiente tabla para la definición de las clases de uso: –
